¡A los miembros de la Fundación Federica Cerdá nos encanta recibir visitas y poder compartir la labor que realizamos desde nuestro centro de hípica adaptada con todos los que se interesan por ella! Por eso estamos muy contentos con la visita de un grupo de alumnos de segundo de la E.S.O de la Escuela Molins Manyanet. Nada más ni nada menos que 60 jóvenes que el pasado 7 de marzo se acercaron a nuestras instalaciones para participar en una Jornada de las emociones“Consideramos que los caballos son seres profundamente sensibles, y por este motivo se nos ocurrió trabajar con ellos el tema de las emociones” nos cuenta Angèlica Hor, tutora del grupo, para añadir que su interés en visitar la Fundación se debía también a que “la hipoterapia trabaja con personas con algún tipo de discapacidad, y eso nos permitía hacer una pequeña campaña de sensibilización con nuestros alumnos”. Así que con el encargo recibido, en la Fundación nos pusimos manos a la obra para diseñar una mañana de lo más interesante. Para empezar, recibimos a los chicos con un vídeo sobre la hipoterapia y sus beneficios. Con la proyección, surgieron las primeras emociones. Por un lado, la tristeza de ver la difícil situación que viven las personas discapacitadas, por el otro, la esperanza de poder ayudarles. Sobre cómo se realizan estás terapias asistidas con animales y sobre los beneficios de la relación con los caballos hablaron también el presidente de la Fundación Federica Cerdá, Federico González, y la directora del área de hipoterapia, Teresa Xipell. Lo hicieron justo antes de que Cristina González, experta jinete, realizara una demostración práctica de doma clásica que despertó sorpresa y admiración a partes iguales.                        crisybandido_jornadamanyanetmolins_04 La empatía con las personas que acuden a hipoterapia fue la siguiente emoción a experimentar, esta vez solamente por parte de algunos miembros del grupo que se sometieron a una demostración de este tipo de tratamiento. Pero sin duda alguna, lo que más emoción despertó en todos ellos fue el hecho de poder montar a caballo. La excitación por estar a punto de hacer algo desconocido, el miedo de los primerizos y la satisfacción y realización personal de los más valientes fueron algunos de los estadios emocionales por los que pasaron nuestros visitantes. Eso sí, seguramente el principal sentimiento experimentado fue la felicidad de la jornada, o como explica Angèlica, “la confianza, la alegría y el amor que proporcionan los caballos”. jornadamanyanetmolins12           jornadamanyanetmolins13 La Molins Manyanet ha sido la primera escuela en organizar una jornada para sus alumnos en nuestra instalaciones, algo que nos ha encantado ya que nos permite difundir la hipoterapia entre los más jóvenes, a la vez, que recibimos una pequeña aportación para poder seguir financiando los tratamientos de quién no puede costeárselos. Sólo nos queda daros las gracias. … Gracias por confiar en la Fundación Federica Cerdá. Gracias por compartir un día de vuestra vida con nosotros. Gracias por ayudarnos a ayudar a los que más lo necesitan.